NETZACH

Netzach (pronunciado netz-ak, con un gutural sonido en la K) es generalmente traducido al ingles como veracidad, corrección, fidelidad, permanencia, perpetuidad, eternidad, excelencia gloria y lo completo, totalidad, perfección. Paul Case agrega a estos significados, la traducción de ¨vida victoriosa¨ en su declaración Nº 7.

Tomado como una serie de  jeroglíficos, la palabra hebrea ¨Nun- Tzadi-Cheth  combina la imagen de abundancia (Nun= pez) con la de autoabastecimiento (Tzaddi=anzuelo) y con la fuerza personalizada de la vida (Cheth=valla). Así Netzach (el reino de Venus) es visto como la encarnación de la abundancia, la auto consolidación de la fuerza de la vida--con énfasis en la fuerza.

Esta fuerza no puede ser definida racionalmente. No puede ser diseccionada con lógica, escrita y comunicada con exactitud de una persona a otra. No hay una segunda  mano, una forma intelectual de agarrar esta fuerza--aunque en Hod, podríamos entender su forma a través  de la razón--esta fuerza puede ser solamente entendida por experimentarla directamente uno mismo.

En términos humanos, Netzach es el reino de las emociones personales. O mas bien, es el reino donde los arquetipos emocionales universales se intersectan con la expresión personal. Esta intersección es pre-racional. Pasa en un inmediato, espontáneo, ilógico, nivel experiencial. Pasa así rápidamente, donde no hay tiempo para interponer razón  a ello. Razón solo puede interceder después del hecho.

Por ejemplo, cuando encontramos alguna cosa, nuestra primera reacción es una emoción del nivel visceral. Es inmediata y espontánea y no tenemos un control conciente sobre ella. Luego nuestra razón  actúa sobre ella y modifica la primera respuesta emocional, manejándola en una forma más personal. Generalmente, nuestra razón no enfoca en alguna cosa que hemos encontrado en y de ella misma, pero si sobre la fuerza de nuestra primera respuesta. Otra manera de ponerlo seria decir que la primera respuesta emocional es la fuerza la cual generalmente gatilla la razón a actuar. La acción de la razón esta dando forma a la emoción.

Netzach es el reino de la fuerza de la Naturaleza, Hod es el reino de la forma de la Naturaleza. Con lógica podemos entender su forma, pero falla cuando cambiamos hacia el Misterio de su fuerza esencial. El Misterio no puede ser tomado intelectualmente, puede ser experimentado en el nivel visceral. Nuestro Templo de Netzach ES este nivel visceral.

El Misterio es atribuido al numero 7. De los números de los 8 planetas (3 de 10), el siete es el único que no puede ser dividido en un circulo de 360 grados con exactitud. 360 dividido por 7 es igual a 51.42857142857 con los últimos seis dígitos repetidos hasta el infinito. Esto significa que el círculo no puede ser dividido en 7 partes iguales. Dibujar una figura de siete lados iguales requiere de inexactitud, uno tiende a estimar y juzgar como la figura luce y eventualmente dejar ir su racional exactitud.

Escondido en este Misterio de 7 en 360, esta el significado de la primera manifestación del dimensional espacio-tiempo: el punto. El punto precede a la línea. No tiene otra dimensión que su singularidad. Es ambos: infinitamente pequeño e infinitamente grande. Si seguimos el punto hacia lo mas pequeño, encontramos y experimentamos lo mismo que dividir 360 por 7 - ya que es infinitamente pequeño por virtud de su externo infinito a ello,  e infinitamente grande por virtud de su infinitud dentro de ello, encontramos que abarca una infinita pequeñez la cual podría tomar una infinita cantidad de tiempo y esfuerzo para nosotros definirla.

Ello no es diferente proponiendo un segundo punto y dibujando una línea entre ellos, que es capaz de dar al punto una definición real. Esencialmente, la definición es una ilusión contextual construida sobre la relación observable del individual y un componente no definido.

Solamente a través  de esta definición da al punto. Y el cual es el caso de Netzach: solamente a través de la personalización esta vestida en forma manifiesta.

Amor, cariño-amabilidad, misericordia: esta es la fuerza primaria, al menos en términos humanos. Ello es el dinamismo del punto el cual, en su singularidad, abarca ambos la infinitud y esta simultáneamente abarcado. Así asociamos la diosa Venus con su reino, porque aquí es tomada como el arquetipo del humano entendimiento del amor.

Esta fuerza del amor en si mismo  no tiene oposición. Es solamente dentro de la forma suministrada por la intercesión de la razón que la manifestación negativa de esta fuerza ocurre. Y estas son encontradas solamente en la mente y corazón humanos. En el resto de la Naturaleza,  en los reinos donde específicamente la razón humana no ejerce dominio, la fuerza del amor se manifiesta sin la forma negativa polarizada.

Esto es debido a diferentes tipos de razón. Por ejemplo, el tipo de razón  abarcado por un árbol  o roca como da forma a la fuerza de la naturaleza, no permite decir a la roca o árbol que fuerza así con mezquindad. Razón humana sin embargo permite tal expresión--ello solo puede  desviar o bloquear el flujo  del amor con tanta facilidad como dejar el amor fluir sin obstáculos. La razón del árbol no abarca el poder de desviar o bloquear así no tiene el poder de hacer alguna cosa pero expresa el flujo sin obstáculos. Pero, resulte sea humano o árbol, representa lo dado de la forma personal única por la misma fuerza esencial.

Mientras el amor ensimismo no tiene opositor, si tiene,  así hablando, hermanos y hermanas. En este reino de Netzach no encontramos solamente la fuerza primaria representada por Venus, también todos los otros arquetipos de la emoción humana. Aquí también están Marte, Phoebe, Júpiter, Artemisa, Saturno, Astarte, Faunus, Pan, Kali, etc. ya que todas las expresiones mitológicas de las expresiones humanas pueden ser encontradas en Netzach, aunque generalmente, uno encuentra los arquetipos que le son más familiares. Esto es otro ejemplo del Misterio de 7 en 360--de la infinita diversidad de unidades que son naturalmente manifestadas cuando la fuerza toma forma.

Nuestro Templo de Netzach es distinto de los Templos que hemos encontrado hasta este momento. No transitaremos a el desde el Templo de Malkuth, en su lugar viajaremos abajo a un paso el cual corta a través de la salvaje Naturaleza, eventualmente guiándonos al Templo de Netzach. Así viajamos a través de este paso encontraremos una serie de cosas las cuales sacaran respuestas de nosotros. Cada respuesta será un ejercicio para mirar mas allá de la segunda forma racional, y esforzándose en percibir la respuesta primaria en su estado no modificado. Cuando alcancemos el Templo de Netzach ensimismo, nos esforzaremos en experimentar el mas profundo nivel de la cosa en si misma lo cual incita a nuestra primaria, nivel visceral de respuesta.

La forma raras veces encaja o combina con la totalidad de la fuerza. En otras palabras, nuestra respuesta racional raras veces luce como nuestra primera reacción emocional, y incluso menos como las cosas en si mismas  a las cuales estamos respondiendo. Esto nos puede guiar a no entender la cosa encontrada,  un entendimiento basado mas sobre una respuesta propia que sobre  la cosa ensimisma que nosotros estamos tratando de entender. El viaje al Templo de Netzach intenta desnudar esas capas de racional ofuscación y traer una, paso por paso, desde la racionalmente respuesta modificada, al más profundo, emocional, nivel visceral de reacción y para la final destinacion de una no reaccionaria percepción de la no modificada fuerza en si misma.

En el reino de Netzach, todos los caminos llevan al centro, donde el Templo esta  ubicado. El Templo como todo lo de Netzach, esta ensimismo vivo y evoca una fuerte respuesta emocional por virtud de su suntuosa belleza verde.

El templo expresa 7 niveles:

1) Nivel del suelo--a través del cual nuestro paso nos guía, desde el cual toda la vida es primavera y a la cual toda la vida retorna. Así en el viaje a través del camino, encontraremos una serie de seres, cada uno de los cuales sacara una respuesta de nosotros. Nuestra tarea es alcanzar profundamente dentro de los mecanismos de nuestra facultad de percepción y dejar la forma racional nos guíe a una percepción de la primaria reacción visceral. Entonces seguimos el nivel visceral hasta que nos guíe a una percepción de la cosa ensimisma, la fuerza no modificada.

2 al 6) Cinco pasos arriba, cada uno para aclarar el entendimiento. Estos pasos repiten los incidentes del viaje a lo largo del camino del Templo de Netzach el cual desnuda las ofuscaciones racionales. El numero cinco implica la plenitud de  la voluntad--estos peldaños deben ser pisados con conciente intención. El sexto nivel (solar) es el piso al cual la no modificada fuerza de la vida ensimisma desciende.

7) El séptimo nivel es donde encontramos la cosa ensimisma, desnuda de modificaciones racionales. Este séptimo nivel esta aquí representado como una fuente de siete lados cubierta por una cúpula formada por siete árboles, soportando siete vidrios ahumados de siete ángulos, y coronado con el signo de Venus.

Si hemos concientemente sacado las racionales modificaciones las cuales oscurecen nuestro entendimiento de la raíz de la fuerza, estaremos otorgando una clara visión dentro de la pileta de la fuente del agua. Podemos entonces, como la famosa pintura de Botticelli sugiere, llamar a Venus desde el agua y experimentar su significado directamente.

MEDITACION  Nº 4  NETZACH

Como es usual: pasar a través de la entrada de la caverna, a lo largo del túnel, subir los diez peldaños e ingresar en el templo de Malkuth donde yo estaré esperando su arribo.

Cuando todos los participantes han llegado, yo los reuniré a todos y formaremos el círculo ritual.

Una vez nuestro circulo formado, permanecemos varios momentos juntos en el centro del Templo de Malkuth, manteniéndonos de las manos en círculo y trayendo a nuestra conciencia la presencia de los otros participantes a nuestro enfoque. Mirando alrededor del círculo prueba sentir la única presencia de cada participante.

En el momento apropiado, traeré nuestra atención al cuarto Este del altar--nuestra entrada a Netzach. Sobre el altar hay puesto un hermoso trabajo con vidrio ahumado y detrás de el vemos la misma cortina y símbolo que encontramos en la entrada de la caverna.

Enciendo las velas sobre el altar, y juntos como una sola voz hablamos la frase ¨I-H-V-H Tzabaoth (pronunciado yod je vau je tsebaoth) por favor guíame a Netzach.

. . . Nos encontramos permaneciendo en el comienzo de un camino compuesto de piedras en forma alternativa de color blanco y negro. Es una oscura noche y luz viene solamente desde las estrellas las cuales llenas el cielo. La luz de las estrellas nos permite ver el camino pasa a través de un territorio salvaje, lleno de densas zarzas de extrañas formas y árboles amenazantes.

Juntos empezamos a caminar hacia abajo en el camino. Pronto escuchamos el ruido que hacen los animales salvajes estrellándose por debajo  de los arbustos. Se sienten como si fueran enormes y que vinieran detrás de nosotros en rápida persecución

Con temor--ya que estas criaturas están haciendo temibles gruñidos, rugidos, que nos comunican una claro sentimiento de peligro--probamos salir a correr para huir de nuestros perseguidores.

Extrañamente, cada paso que damos el camino nos mueve hacia delante no solo en distancia sino también en tiempo. Como nosotros corremos, el tiempo pasa rápidamente y el cielo empieza a brillar con la saliente Luna llena. Vemos que hemos pasado varios kilómetros muy rápidamente y en la luz de la Luna y vemos ante nosotros acercarse una muralla no escalable. Detrás de nosotros vemos nuestros perseguidores a la distancia--ahora a la luz de la luna, podemos decir que hay dos de ellos que aun corren tras nosotros.

El camino nos guía a una pesada puerta de madera, la única manera de pasar la muralla. La muralla parece alargarse tanto como el ojo puede ver a la derecha y a la izquierda. Tratamos de abrir la puerta y no podemos. Golpeamos la puerta y gritamos desesperados ya que nuestros perseguidores viene cada vez más cerca con cada minuto que pasa.

Finalmente, no tenemos donde ir: no donde escondernos ni poder pasar la muralla que obstaculiza nuestro paso. Así, nos damos vuelta para defendernos de nuestros perseguidores. Justo cuando nos volvemos ellos llegan. Gruñendo ellos emergen desde las sombras y caminan dentro de un rayo de luz de la Luna.

Ja! En la luz de la Luna, vemos que ellos son solamente una pareja de perros moviendo la cola y no  la despiadada, criatura comedora  de hombres que habíamos imaginado. Nuestro temor cambia a alivio así agradecemos a estos animales y los encontramos  amigables.

Solo entonces, la puerta en la pared se abre y un alto, poderoso hombre, vestido en pieles y sosteniendo un mazo, aparece. El se presenta asimismo como el guardián de la puerta y nos habla acerca de los perros. Ellos son los guardianes del camino quienes cuidadosamente arrean a los viajeros a la seguridad de la puerta. Mientras están arreando, ellos naturalmente ladran y gruñen, para mantener las bestias salvajes lejos de los viajantes. En ningún momento estuvimos en peligro por estos perros, ellos estaban solamente para asegurar nuestro seguro caminar.

El guardián es amigable y nos guía a través de la puerta al otro lado de la muralla. Aquí el camino nos lleva abajo a través de un amigable territorio. El guardián de la puerta envía sus perros con nosotros para que sean nuestros guías y acompañantes--no hay una gran necesidad de ellos para protección ahora que estamos al otro lado de la muralla. La Luna llena esta ahora muy alto en el cielo y tenemos plena luz plateada para ver nuestro camino.

Con renovado vigor y alegría continuamos camino abajo. Tiempo y distancia pasan rápidamente con cada paso dado. Cruzamos sobre una colina y descendemos a un gran valle. La vista es impresionante a la luz de la Luna.

Justo cuando la  Luna se esta escondiendo detrás de nosotros y el Sol esta apareciendo delante de nosotros, el camino nos lleva a la orilla de un río. El  color dorado del amanecer se refleja en la superficie del río. No podemos ver debajo del agua para calibrar su profundidad y poder pasar, pero debemos cruzarlo  ya que el camino desaparece en este lado y reaparece en el otro lado del río.

A nuestra izquierda a unos pocos pasos notamos a  alguien en un oscuro abrigo, agachado a la orilla del agua, llorando. El se lamenta que esta temeroso de cruzar el ancho y profundo río por temor a  ahogarse. Aun el murmura acerca de esto deseando cruzar, acerca de su deseo por la meta del final del viaje,  lo cual lo llama y causa su angustia. El enfrenta su temor pero no lo penetra y ahora el se agacha llorando, frustrado, sin poder, destrozado entre dos presiones: la seguridad de la auto conservación y el riesgo del auto-crecimiento.

A nuestra derecha vemos otra persona, que se esta bañando en la orilla del agua. Esta de cuclillas, desnuda cerca el oído del río, y cantando una oración. Ella pregunta al río que la limpie del temor y la favorezca con la bendición de poder cruzar. Al momento ella se zambulle en el río y nada hacia el lado contrario. Es dificultoso nadar pero ella es fuerte y determinada. Ella esta bendecida por el río y emerge segura para continuar su viaje. Tal vez  la veamos a ella nuevamente mas tarde.

Como el Sol aparece en la colina contraria y sus primeros rayos cubren el valle, nuestros dos perros guías dan un ladrido y nos guían a la derecha  del fin del camino adentro del agua. Ellos salpican a lo largo y juegan sin ningún temor. Para nuestra sorpresa, el agua solamente les llega a sus rodillas y no es mas profundo así ellos van mas lejos. Un rayo de luz del Sol revela que el camino esta justo bajo la superficie del agua y va derecho cruzando con seguridad.

Dándonos cuenta que no hay necesidad de temor comunicamos esto al tipo que esta llorando. El se levanta y nos acompaña a través del río. Cuando cruzamos nos bañamos en el agua y cantamos nuestra propia oración de agradecimiento. El cuerpo entero del Sol esta sobre la colina justo cuando nosotros pisamos la orilla contraria.

Con el Sol completamente a la vista, el antiguo tipo llorando revela su verdadera  identidad. Sin su oscuro abrigo muestra alas del más puro blanco y esta ante nosotros nuestro radiante amigo Rafael. Ella/El, el guardián del Este y el elemento Aire es el guardián del cruce de las aguas. Así el tipo llorando, nos mostró  tener cautela por su aviso, como el desnudo nadador, el mostró  respeto por la fe. Juntos ellos nos retrasaron hasta que la luz del Sol  revelara el verdadero camino. Aquí en la orilla contraria, en toda la luz del sol, los dos se reúnen y revelan ellos mismos ser Rápale. Nosotros también hemos sido bendecidos por el río!

Continuamos nuestro viaje abajo por el camino de piedras blancas y negras. Ahora caminamos con toda la luz del Sol del día y podemos ver el Templo de Netzach, aunque esta aun lejos de nosotros. No lejos  a la izquierda y a la derecha, podemos ver otros caminos convergiendo al templo. Aquí y ahí podemos ver otros seres. Algunos están caminando determinadamente a través del camino, otros parecen estar caminando sin sentido entre los caminos, y aun otros parecen ocupados en una actividad determinada, como si representaran algún tipo de personal drama. Por todos lados alrededor de nosotros vemos vida y más que solo verla, la sentimos.

Al fin llegamos al Templo. El Sol ha progresado pasando el cenit y ahora se inclina adentro del Templo desde el Oeste.

Subiendo los cinco peldaños, revisamos la lección aprendida desde los incidentes de nuestro viaje a través del camino.

Nos reunimos con las manos unidas en un circulo alrededor del centro de la fuete de siete lados y llamamos el nombre  ¨IHVH Tzabaoth¨. Miramos dentro de la fuente y vemos a Venus emergiendo desde el agua. Ella viste nuestras propias caras, y aun ella viste todas las caras a la vez. Venus permanece en la fuente y nosotros nos regocijamos en el amor que ella muestra sobre nosotros.

Cada uno tiene sus propias palabras con ella…

En el momento apropiado, Yo llamo la atención a todos y juntos agradecemos a Venus por su amabilidad. Juntos entonces como una sola voz, decimos la palabra Malkuth, con lo cual pasamos suavemente atrás la centro del Templo de Malkuth.

Después de unos pocos momentos de reorientación, desarmo el círculo formado. Luego los participantes sale como es usual: debajo de la escalera, a lo largo del túnel, y fuera de la entrada de la caverna, finalmente regresando a la normal conciencia física.


TRABAJOS SIGUIENTE --

Como siempre, escribe algunas notas resumiendo tus experiencias.

En los días inmediatamente siguientes a tu meditación en Netzach, pone atención a los incidentes en tu vida. Trata de ver la apariencia superficial y su significado subyacente.

Retorna regularmente al Templo de Netzach y busca consejo con relación al significado de los eventos específicos de tu vida y de específicos aspectos de tu personalidad. Así tú sigues el camino desde el Templo de Malkuth, permite a ti mismo encontrar  lo que sea  tu viaje presente. Invariablemente, Netzach nos hablara a través de símbolos en una manera similar a--aunque mas espontánea que--esta meditación escrita.

El Templo de Netzach es un valor similar al templo de Hod. Aquí tú puedes incrementar tu entendimiento emocional de las cosas. Usa este valor, así como tú usaste la racionalidad de Hod, para complementar tu trabajo de auto maestría de tu personalidad. Persigue conversaciones con cada uno de los relevantes arquetipos emocionales suministrados en Netzach y completamente explora este reino.